La alimentación emocional es una de las principales razones por las que las personas tienen problemas para seguir una dieta y no pueden practicar un control de peso adecuado. El hecho es que hay una serie de factores externos e internos que influyen en la alimentación emocional.

Las empresas de alimentos hacen un llamado emocional para que usted coma

Durante años, el gigante de los restaurantes de comida rápida McDonald's utilizó el lema "Hoy te mereces un descanso". Esto permitió que cientos de millones de personas asociaran comer en McDonald's con un descanso emocional de su agitado día. De más está decir que no hay demasiadas ofertas saludables en un restaurante que utiliza un payaso como portavoz.

McDonald's no es la única empresa que apela a tus emociones. Muchas empresas de postres asocian sus productos con recompensas o darse un capricho. De hecho, descubrirá que los alimentos más saludables se le anuncian de forma emocional. Por lo tanto, si busca alimentos que le ayuden a sentirse mejor, se encontrará comiendo nada más que alimentos poco saludables.
Tu cerebro emocional quiere que te comas tus sentimientos
La guerra por un peso saludable también se libra dentro de tu propia mente. Según Psychology Today, tus pensamientos y acciones están gobernados por dos "cerebros": tu cerebro emocional y tu cerebro ejecutivo. Su cerebro emocional es muy parecido a un niño pequeño que reacciona a cualquier estímulo emocional mientras su cerebro ejecutivo maneja todas las funciones superiores. Sin embargo, es el cerebro emocional el que puede hacer que comas en exceso cuando estás emocional.

La clave para una alimentación saludable: eliminar las emociones de la ecuación
Una de las formas comprobadas de controlar la alimentación es eliminar el aspecto emocional relacionado con la alimentación. Esto se puede lograr de varias maneras. En primer lugar, los estudios han demostrado que comer despacio puede ayudar a perder peso. La alimentación emocional se asocia con la alimentación rápida. Por lo tanto, comer más lentamente puede ayudar a reducir la cantidad de ingesta calórica.

Además, planificar con anticipación puede ayudar a desempeñar un papel importante en el control del peso. La clave aquí es eliminar el comer impulsivamente. Por ejemplo, puedes mirar tu día y decir: "Cuando termine con mis quehaceres, me sentaré y comeré un sándwich de pavo y queso con una manzana". Este tipo de planificación puede ayudar a prevenir la ingesta innecesaria de alimentos.

Creando un sistema de recompensas para la salud
Una de las formas más efectivas de controlar la alimentación es crear un sistema de recompensa por una alimentación saludable. Hoy en día, las personas pueden utilizar servicios tecnológicos para alcanzar sus objetivos de pérdida de peso. Con GoalValor, puede crear un contrato inteligente que se establezca en torno a sus objetivos de pérdida de peso u otro tipo de objetivo. Como ejemplo, puedes comprar un contrato inteligente con €100. Si alcanza su objetivo, puede revender el contrato por €200 y obtener una ganancia del %100. Si no alcanza su objetivo, su contrato pierde valor. Esta carga emocional relacionada con arriesgarse y recompensarse con dinero puede ayudar a compensar los factores emocionales relacionados con el consumo impulsivo.